En las últimas décadas, la educación ha pasado por un proceso de transformaciones muy vertiginoso que ha generado un cambio radical en cuanto al lugar y a la intención con la que se practica la educación y las herramientas que se utilizan para concretar esta labor. Hoy en día, el proceso educativo no solo puede ser realizado de la forma tradicional, en donde el profesor se para frente a una pizarra y enseña a sus alumnos las competencias que éste debe dominar, ya que por otro lado, también han cambiado los recursos que se utilizan para llevar a cabo un proceso de aprendizaje, puesto que, ya no solo es el libro y los apuntes de los alumnos los que contribuyen en esta tarea. En la actualidad las tecnologías cumplen un rol muy importante dentro del proceso de educación de las personas, ya sea, en su etapa de estudio inicial formal, como en la educación profesional o la educación a lo largo de la vida, puesto que entregan nuevas posibilidades para generar estrategias didácticas adecuadas para facilitar el aprendizaje.
Esta nueva realidad debe ser entendida dentro del marco entregado por los cuatro pilares de la educación contenidos en el informe Delors, estudio encargado por la UNESCO a la Comisión Internacional para la Educación para el siglo XXI en 1996. Aquí se establecen como pilares fundamentales de la educación actual:
- Aprender a conocer: que consiste en poseer una cultura general amplia, con conocimientos básicos de una gran cantidad de temas y conocimientos profundos específicos de algunos temas en particular. Implica aprender a aprender para continuar incorporando nuevos conocimientos a las estructuras ya establecidas.
- Aprender a hacer: que se refiere a las competencias temporales que permiten hacer frente a las situaciones cotidianas, resolver problemas, encontrar nuevas maneras de hacer las cosas, trabajar en equipo.
- Aprender a ser: referido a las potencias la capacidad de las personas a fin de lograr un crecimiento integral que favorezca la autonomía, la toma de decisiones responsables, el equilibrio personal, la adquisición de valores como la autoestima positiva, el respeto hacia uno mismo.
- Aprender a convivir: referido a la capacidad de las personas de entenderse unas a otras, de comprender los puntos de vista de otros aunque no se compartan, de realizar proyectos comunes en bien de todos, es decir, significa aprender a vivir juntos (Delors, 1996).
Será bajo estos cuatro principios, que se logrará una mejor evolución y resultados del proceso educativo, entendiendo ésta como una tarea que se realiza dentro de un contexto mayor que es nuestra sociedad globalizada y que utiliza todos los aspectos que esta sociedad moderna comprende.
En una primera instancia de este proceso de transformaciones en materia educativa, el foco estuvo puesto en el desarrollo de la educación mas allá de la escuela y del ámbito formal, es decir, en potenciar la Educación no formal, entendida como "Toda actividad organizada, sistemática, educativa, realizada fuera del marco del sistema oficial, para facilitar determinadas clases de aprendizaje a subgrupos particulares de la población" (Coombs, 1990). De este modo se desarrollaron ampliamente en la sociedad, otras formas de educación fuera de la escuela formal, de las cuales, un buen ejemplo es el representado por las entidades que se ocupan de la educación popular, que atienden las necesidades de la población segregada y vulnerable socialmente, para poder combatir a la exclusión que el propio sistema ha generado sobre ellas. Pero en la actualidad, nos encontramos en una segunda etapa de estas transformaciones en el ámbito educativo, que es al que queremos dar mayor importancia y que se refiere a un proceso de transformación social en el que se desarrolla una nueva cultura del aprendizaje, en la que inciden directamente las nuevas tecnologías de manera decisiva, generándose un nuevo concepto de aprendizaje, basado en la Sociedad de la información, la que entenderemos como un sistema social basado en el soporte de las nuevas tecnologías que facilita el acceso a todo tipo de información, en donde la capacidad de acceder a esa información y de otorgarle un significado se denomina Sociedad del conocimiento.
Dentro de esta sociedad del conocimiento y debido a las características propias de la globalización, surge la necesidad imperiosa de la educación a lo largo de la vida, para responder de manera eficiente a las competencias que presenta en la actualidad el mundo laboral y el ámbito de los conocimientos. En este proceso continuo de educación, la presencia y utilización constante de las TICs facilita enormemente la tarea, puesto que, el ritmo de nuestras sociedades y la diversidad de tareas a las que debemos dedicarnos, nos dejan poco tiempo para realizar la labor de educación continua, y más aun, a lo largo de la vida. En esta ardua tarea, debemos tener en cuenta y considerar permanentemente para no perder el rumbo y lograr una educación de calidad a lo largo de nuestras vidas los cuatro pilares de la educación, los que vendrán a servirnos como guía y sustento permanente.
A modo de conclusión podemos afirmar que la educación a lo largo de la vida es una de las llaves para entrar en la sociedad del conocimiento del siglo XXI, entendiendo que este tipo de educación va más allá de la distinción tradicional entre educación principal (o profesión) y educación permanente y coincide con otra noción formulada a menudo, la de sociedad educativa, en la que cualquier instancia puede ofrecer la ocasión para aprender y desarrollar las capacidades de cada individuo. Bajo esta nueva realidad, la educación permanente se concibe como algo que va mucho más allá de lo que hoy se practica, particularmente en los países desarrollados, en donde se realizan actividades de nivelación, de perfeccionamiento y de conversión y promoción profesionales en personas adultas. Lo que ahora se intenta a nivel global (en la medida en que los países pueden) es ofrecer la posibilidad de recibir educación a todo el universo de la sociedad, bajo distintos objetivos según las aspiraciones de cada individuo, brindar una segunda o tercera ocasión educativa, satisfacer la sed de conocimientos personal o deseo de superación personal, perfeccionar y ampliar los tipos de formación estrictamente vinculados con las exigencias de la vida profesional, incluidos los de formación práctica.
Dentro de las posibilidades que nuestro mundo globalizado nos ofrece, es tarea primordial de la educación a lo largo de la vida aprovechar todas las posibilidades que ofrece la sociedad, para concretar de la mejor forma posible la tarea educativa, la que depende casi exclusivamente de la motivación y empeño que cada individuo ponga en su propio proceso de aprendizaje constante.
educación que tratan de llenar los vacíos que la educación formal ha ido dejando. Dentro de estos nuevos tipos estudiaremos la Educación Ambiental y Educación Popular.
